Presionas a tu hijo si…

  1. Primas el resultado ante el rendimiento: el deporte gira en torno a puestos, puntos y clasificaciones, pero especialmente, en etapas de formación no podemos perder de vista que el deportista está aprendiendo no solo a practicar su deporte, sino a jugar en la vida: el esfuerzo no siempre trae el éxito, hay que sobreponerse a la caídas, o tener una cabeza fría para saber competir. Ahora es más importante el “cómo lo hago” (rendimiento) que el resultado.
  2. Analizas su partido como un entrenador y le dices continuamente lo que debería haber hecho. La conversación después de una competición no gira en torno a qué bien te lo has pasado viéndolo jugar o a si él ha disfrutado. Analizas cual periodista deportivo punto a punto las jugadas, y por supuesto, en tu crónica, señalas los errores y obvias los aciertos.
  3. Le pides más de lo que objetivamente puede dar: que nuestro hijo no llegue a lo más alto a veces es visto por los padres como un fracaso propio. Exigir por encima de las posibilidades reales del niño no le va a ayudar a crecer, sino que le va a hacer sentir desconfiado e incapaz.
  4. No sabes controlar tus emociones: en cada golpe que falla, se te cambia la cara; en cada balón que le roban, gritas como un energúmeno. Si tú estuvieras jugando, lo sentirías diferente. Pero, ¿quieres saber por qué nos ponemos tan nerviosos en las gradas? Porque lo que ocurre en el campo no depende de nosotros. Y las personas, llevamos fatal eso de no tener el control de la situación.
  5. Le recuerdas lo que le sale mal antes de la competición en un intento de que esté pendiente y concentrado, pero entrar en el campo recordando lo que puede salir mal, psicológicamente no ayuda.
  6. Apoyas en exceso desde la grada y eres el padre al que más se le oye. Lo vas a desconcentrar y, en algunos casos, avergonzar.
  7. Inculcas competitividad: ganar no lo es todo, y no se lo hagas ver así, pues si no, ante la derrota, se sentirá más frustrado.
  8. Fomentas su motivación negativa en lugar de la positiva. Es decir, tu hijo se esfuerza en su deporte más por evitar lo negativo (tus enfados cuando pierde, que el entrenador le regañe si no está puntual) que de centrarse en lo positivo que obtendrá en su deporte.
  9. Presumes de tu hijo delante de él. Se nos olvida que tienen oídos, aunque sean muy pequeñitos. Y cuando te oye ir diciendo a tus amigotes que tu hijo es el mejor del mundo, le estás poniendo un estándar que no siempre podrá mantener. Más que nada porque antes o después todos fallamos, recuerda.
  10. No tienes en cuenta sus sentimientos o ridiculizas lo que siente: aunque para ti no sea importante, para él lo que está viviendo en su presente es lo más. Déjalo que llore si lo necesita o está triste.

 
Zoraida Rodríguez Vílchez
@ZoriPsicologa para IDEAL GRANADA

Deja una respuesta

Post relacionados

Trastorno Negativista Desafiante (TND)

Para los padres, educar a un niño desafiante puede convertirse en todo un reto, ya que puede resultar muy difícil mantener la compostura y saber cómo actuar ante determinadas conductas. Cuando el problema de conducta es muy evidente e interfiere en la vida del niño y de la familia, podría considerarse la presencia de un … saber más

Motivar no es dar premios

Muchos entrenadores se estrujan las ideas para averiguar cómo motivar a sus deportistas y sacar lo mejor de ellos. Está claro que una persona motivada rinde mucho más que uno que no lo está y que compite con desidia o por inercia. Pero no todo vale en términos de motivación. Motivación no es tener ganas … saber más

Y además de reforzar, ¿qué puedo hacer?

No todo comportamiento se debe moldear a través de un “bien hecho”. Existen otras técnicas para aumentar la frecuencia de una conducta apropiada o bien para erradicarla. Para aumentar la frecuencia de una conducta deseable, además del refuerzo positivo (dar un premio o hacer un halago) podemos utilizar el refuerzo negativo. Esto es: si la … saber más

Preparación mental en pretemporada

Si el cuerpo se relaja en vacaciones, ¡la mente también lo hace! La pretemporada es el momento para poner a punto físicamente a nuestros jugadores y deportistas para la larga temporada que nos queda: dobles sesiones de entrenamiento, mucha carga física, concentraciones… ¿Y qué pasa con la mente? Se nos sigue olvidando que mente y … saber más

Influencia de los demás en la mejora o empora del rendimiento

Un ciclista corre más acompañado, que en solitario. Un runner no deja de ir a correr si tiene un grupo con el que queda cada mañana. La presencia de otras personas puede aumentar y mejorar el rendimiento. Solemos dar más de nosotros cuando hay alguien mirando. Este fenómeno se conoce como facilitación social. Este hecho … saber más

El impacto psicológico de la cuarentena y cómo reducirlo

La semana pasada os recomendé un pequeño decálogo sobre cómo sobre llevar la cuaretena y os di 70 ideas para ocupar el tiempo ocioso. Hoy me quiero centrar en los síntomas más frecuentes que me estoy encontrando en mis pacientes y quiero daros algunos consejos para reducirlos. Empecemos por los niños: el tiempo pasa igual … saber más