Desconectar en vacaciones

Y el séptimo día… descansó. Hasta eso dijeron de Dios: que también se tomó sus vacaciones. Y es que para todos es necesario este merecido descanso. Durante todo el año trabajamos duro y vamos agotando nuestras pilas. Por desgracia el ser humano no es una fuente inagotable de energía y en algún momento tenemos que parar.

Hay personas incapaces de hacer un “stop” en su vida profesional: entrenadores, deportistas de élite, altos ejecutivos o trabajadores que se sumergen en su actividad y hasta en vacaciones, son incapaces de desconectar. No tiene por qué llegar a la patología, pero hay quien lo llama “workaholic” o adicción al trabajo.

Nuestra sociedad fomenta esta situación, ya que a la mayoría de nosotros nos han inculcado el valor del trabajo, del esfuerzo, de darlo todo y ser ambiciosos y querer siempre más. Incluso, las personas nos definimos por nuestro trabajo. Si a ti te preguntaran quién eres, ¿qué dirías? Probablemente yo diría: “soy psicóloga, me llamo Zoraida”. Somos tenistas, futbolistas, entrenadores de natación, médicos o fisioterapeutas… Somos a lo que nos dedicamos profesionalmente. Y cuanto más destaquemos, mejor. Estas ideas, junto con el miedo al fracaso, la necesidad de aprobación de los demás, la falta de autoestima, etc. hace que las personas nos sumerjamos en nuestro trabajo y terminemos en la playa pegados a un móvil de última generación porque si no… ¡no podemos ver el correo!

Pero aunque en el esfuerzo siempre hay una horquilla que podemos estirar, antes o después nuestro cuerpo dice basta. ¿No te ha pasado en alguna ocasión en la que, ya estando agotado, has recibido una llamada y has tenido que quedarte a trabajar unas horas o días más? El organismo es capaz de hacer ese sobreesfuerzo ante lo que consideramos una demanda importante aunque en ese momento creyéramos que no éramos capaces de hacerlo. Cuando después, por fin, llega el descanso… ¡enfermamos o caemos completamente rendidos! Esto es así porque en situaciones de “emergencia” nuestro sistema nervioso autónomo es capaz de sacar energías de donde no las hay, pero a costa de nuestras defensas y de generar un montón de hormonas perjudiciales para nuestro cuerpo, especialmente el cortisol, la conocida hormona del estrés.

Si estás a punto de empezar tus vacaciones o aún te quedan algunos días de ellas ¡toma nota!: desconecta. El mundo no se acaba si tú no estás ahí. Tú no tienes por qué hacerte cargo de todo; avisa si es necesario, manda un mensaje o haz que tu correo emita una respuesta automática avisando de cuándo será tu vuelta; pero descansa y date el premio a ese esfuerzo anual. Igual que recompensas a tus deportistas o trabajadores, hazlo contigo mismo. El año que viene también será duro y te necesitamos renovado, con ganas y listo para exprimir toda tu creatividad y potencial. Por eso yo también aprovecho y me tomo un pequeño paréntesis, no sin antes daros a todos las gracias por seguirme y a IDEAL por permitirme haceros llegar un poquito de psicología y espero, optimismo. ¡Nos vemos en Septiembre!

 
Zoraida Rodríguez Vílchez
@ZoriPsicologa

Deja una respuesta

Post relacionados

Sin mi media naranja

En febrero, el mes del amor, puede que escuchemos mucho esta frase. Y es que hay muchas personas que viven buscando y esperando a encontrar su media naranja. Desde el príncipe azul de los cuentos, a los consejos de las madres a sus hijos (“busca una buena mujer, que sea ordenada, que tú eres un … saber más

La psicología del miedo al coronavirus y las claves para manejarlo

¿Cómo afrontar y superar el miedo al contagio? Las personas tenemos la idea errónea de que hay emociones positivas y negativas, y claro está, huimos y hacemos todos los esfuerzos posibles para tratar de evitar estas últimas. Tenemos que erradicar esta idea de nuestra cabeza y asumir que TODAS LAS EMOCIONES SON BUENAS. Lo son … saber más

Objetivos para 2018

Si has empezado 2018 con muy buenas intenciones y no quieres caer en el intento y cometer los errores de siempre, aquí tienes un decálogo para que llegues a diciembre muy, muy satisfecho de ti mismo y de tus logros. Parte del año pasado. No vale con ponerse objetivos sin ton ni son. Reflexiona sobre … saber más

¿Qué hacer cuando ya no se siente lo mismo? Cómo actuar.

La gente me pregunta: ¿es posible recuperar el amor del primer día?, ¿Qué puedo hacer para volver a enamorar a mi pareja? ¿Y para enamorarme yo? Por desagracia, estas personas están buscando alguna fórmula mágica para volver a sentir lo mismo que al inicio de su relación y se van a sentir decepcionados con la … saber más

Agresividad en la adolescencia

La agresividad es una tendencia a actuar o responder de forma violenta. A menudo, estos comportamientos son una forma de gestionar emociones como la ira o la frustración, o como estrategia para aumentar la sensación de control sobre la situación o los demás imponiéndose. Por qué aparece la agresividad en la adolescencia La adolescencia es … saber más

En qué consiste el Síndrome del Niño Emperador

El Síndrome del Niño Emperador es un comportamiento en el que el niño muestra una actitud autoritaria y manipuladora hacia sus padres, logrando controlar casi todos los aspectos de la vida familiar. Este fenómeno se ha vuelto cada vez más común en muchos hogares, y es un tema que preocupa a los psicólogos y educadores … saber más