Celos

¿Quién no los ha sentido alguna vez? Celos por la pareja, porque mi mejor amigo pasa más tiempo con un nuevo compañero de clase o porque mi entrenador le presta más atención a otro chico del equipo que a mi… cuando siempre he sido su “deportista con mayor talento”.

Los celos son una emoción compleja que surge cuando percibimos una amenaza contra algo que consideramos de “nuestra propiedad” o exclusivamente nuestro. No importa si la amenaza es real o percibida. Puede ser que efectivamente nuestra pareja se esté alejando de nosotros y flirtee con una tercera persona o pueden ser suposiciones nuestras; el caso es que surge ese miedo a la pérdida, que nos trastoca tanto.

¿Por qué surgen los celos cuando creemos que podemos perder a ese alguien? Es curioso, ya que la emoción asociada a la pérdida suele ser la tristeza (por ejemplo, cuando un ser querido fallece); sin embargo, en los celos, aún estando el miedo a perder a alguien, la emoción que aflora con más fuerza es esa rabia por ver que nos están quitando lo que es nuestro. Es como si alguien traspasara los límites de nuestra casa, y sentimos la necesidad de luchar y defender nuestra propiedad. La rabia lleva al ataque, y ahí es cuando surgen comportamientos que desde fuera parecen absurdos en un intento de recuperar lo que la tercera persona te está quitando. El joven deportista se pelea con el nuevo favorito o el trabajador que teme que su jefe le dé el puesto a otro, lo amenaza advirtiéndole que se quite de en medio.

Incluso, esos celos y esa rabia se pueden dirigir contra la persona amada. En la mente surge un pensamiento de “¿tú, cómo te atreves a alejarte de mí o a preferir a otro?”. Y de nuevo necesitamos luchar por esos límites que creemos se están traspasando; esta vez, los límites hacen referencia a mi valía como persona. Pues cuando yo siento celos y veo que alguien deja de tenerme en ese pedestal, me creo que he dejado de tener aquello que lo mantenía a mi lado, y que ya tengo poco que ofrecer. El deportista pierde su confianza creyendo que al dejar de ser el preferido del entrenador es que ya no es tan bueno en su deporte; y el amigo al que dejan de lado, creerá que ya no es tan divertido como antes.

Está claro que todos hemos sentido celos alguna vez, y los sentimos porque pensamos que a nuestro lado hay algo valioso (esa pareja, amigo, el entrenador…) que podemos perder, y no queremos quedarnos sin ello. Que en un momento puntual esto se nos pase por la cabeza es normal, cuando los celos comienzan a ser patológicos es cuando nos llevan a hacer conductas como impedir a la pareja que se relacione con cualquier otra persona; de contradependencia (yo dependo del otro, pero necesito que el otro solo dependa de mí y nadie más); o centrar la atención exclusivamente en buscar pruebas de que vamos a ser abandonados.

 

Zoraida Rodríguez Vílchez
@ZoriPsicologa para IDEAL Granada

Deja una respuesta

Post relacionados

Nueva temporada, nuevos proyectos

En estas fechas parece que todo vuelve a recobrar vida. De calles desiertas abandonadas por los veraneantes en busca de su merecido descanso pasamos al bullicio diario que nos dice que algo comienza de nuevo. Lo indica el comienzo de la Liga, de la temporada de otras modalidades deportivas, los niños que vuelven al cole, … saber más

Como superar una ruptura cuando todavía se ama

Si te acaban de dejar y aún amas, te estarás preguntando: ¿cómo es posible que esto haya ocurrido?, ¿cómo no lo vi venir?, ¿cómo no me di cuenta de que esto iba a llegar?, ¿tengo yo toda la culpa?, ¿podría haber hecho algo para que esto no ocurriera?, ¿volverá a mi lado?… Un cúmulo de … saber más

Martes 13: psicología de la superstición

Hoy, martes y 13, es un día al que muchos le tienen cierto respeto, como poco, y gran terror, como mucho. De hecho, para éste último hay hasta nombre: “trezidavomartiofobia”. El origen de esta superstición viene desde teorías que hablan de los vikingos, hasta que 13 eran los invitados a la Última Cena de Jesucristo; … saber más

¿Ganas o pierdes antes de competir?

La actitud a la hora de enfrentarnos a un reto o a una competición lo es todo. Vendemos la piel del oso antes de cazarlo o tiramos la toalla antes de entrar a jugar. Aunque a veces no nos demos cuenta, anticipamos lo que va a ocurrir y actuamos en base a ello. No importa que hablemos … saber más

Cómo gestionar la fatiga pandémica

El pasado mes de marzo se cumplió un año desde que se declaró la pandemia sanitaria debido al coronavirus. Esta situación ha generado grandes cambios en nuestras rutinas y modelo de vida, como, tener que vivir sin poder salir de casa, teletrabajar o no poder ver a nuestros seres queridos. La vivencia de esta situación … saber más

Entrenador sin psicología... Costurera sin hilo.

Cocinero sin sartén o mago sin varita. Mil ejemplos podríamos poner para ilustrar la misma idea: hay herramientas que son imprescindibles en cada profesión. Y en el deporte, ya no vale solo con saber de técnica, táctica o preparación física. El entrenador ha de disponer de herramientas de psicología si realmente quiere hacer su trabajo … saber más